¿Qué es una empresa familiar? ¿Cuáles son lo beneficios o desventajas? ¿Existen modelos a seguir? Estas y otras dudas son las que aclara el nuevo curso que está impartiendo el Nodo Logístico de Comercio Exterior de la Escuela de Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV), llamado “Gestión moderna de empresas familiares”.
El objetivo macro de esta capacitación es poder entregarle mejores herramientas a los dueños o ejecutivos de empresas de transporte y aduaneras, traspasándoles conocimientos que les permitan gestionar de forma más profesional sus empresas. Esto es sumamente importante, ya que se estima que la mayoría de los emprendimientos de este tipo no logran trascender a las segundas generaciones debido a problemas en su gestión.
Luis Villarroel, Ingeniero Comercial y Subdirector de Desarrollo del Centro de Formación Técnica (CFT) de la PUCV, es el profesor a cargo del curso y explica que “el concepto de empresa familiar, indistintamente del tamaño que sea, enfrenta los problemas que son propios de las familias. Y en esa lógica, lo que uno debe tratar de entregar son técnicas que permitan gestionar la sucesión desde la primera a la segunda generación”.
El académico hace una diferenciación entre profesionalización y formalización en la gestión de este tipo de empresas, ambos elementos que son sumamente importantes. La primera se trata sólo de aprender una técnica específica, que permita dirigir y tomar decisiones, mientras que la segunda apunta a darle una estructura a la compañía, que permita adecuarse a las necesidades del mercado y de los clientes.
Con esta definiciones, el profesor Villarroel también conceptualiza, por un lado, a la “empresa familiar”, que es aquella que está partiendo o que con algún recorrido importante aún no logra una mayor formalización, y en un estadio superior ubica a la “empresa de familia”, que es aquella que está mucho más ad portas de una mejor gestión y, por ende, de una sucesión a la segunda generación.
“Para estructurarse requieren de ciertos elementos que son específicos de ellas, porque hay que considerar que hay familia relacionada en la propiedad o en la gestión. Entonces la dificultad está dada porque son relaciones similares a las que tienen en la casa y que muchas veces se replican en la empresa”, explica el experto del CFT.
Agrega que “los valores aquí son fundamentales. Los valores que tiene la familia y cómo han definido los mismos valores al interior de la empresa, en conjunto con el personal, van a definir la facilidad con que se logra la profesionalización y formalización”, aunque esto no implica dejar de ser una empresa familiar.
¿Pero es posible abstraerse de las relaciones familiares en la gestión de la empresa? “Creo que no es fácil, sobre todo por nuestra idiosincrasia, pero definiendo bien los objetivos estratégicos de la empresa, donde todos hemos participado en su concreción y por lo tanto estamos de acuerdo, todos nos anteponemos al bien mayor”, asegura Luis Villarroel.
Finalmente, para el profesor el punto de equilibrio que puede alcanzar una empresa de familia, está dado por preocuparse de los siguientes puntos: identificar que es lo que quiere llegar a ser; identificar qué es lo que se está dispuesto a ser hoy; analizar las competencias de las personas que lo componen; y distribuir los cargos en función de las competencias y no por afectos (no porque se es el hermano mayor se tiene el mejor cargo o el de mayor responsabilidad).
Dentro del programa del curso que está desarrollando el Nodo Logístico de Comercio Exterior, que es apoyado por InnovaChile de Corfo, están los temas qué es una empresa familiar; ventajas, desventajas y problemas frecuentes; modelos de empresas familiares: evolutivo, Barnes & Hershon, Adidez, sucesión y coaching; tributación de una empresa familiar; y gestión y control. La capacitación, en la que están participando dueños y ejecutivos de diversas compañías de la región, concluye el próximo 26 de marzo.
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